Los altavoces empotrados en el techo, diseñados para caber en espacios pequeños o utilizarse en múltiplos para un sonido de fondo difuso, son realmente difíciles de conseguir. Si el transductor es demasiado pequeño, no habrá suficientes graves sin añadir un voluminoso subwoofer, pero la alternativa habitual son los altavoces de 2 vías, en los que el tweeter se sitúa delante de un pequeño transductor de graves/medios. El problema es que el transductor se dispara alrededor del cuerpo del tweeter, lo que inevitablemente produce coloración. El nuevo Bowers & Wilkins CCM632 es un único transductor de gama completa de 75 mm (3 pulgadas) con un sonido maravillosamente bien equilibrado, que elude los problemas tradicionales de los altavoces pequeños y sigue ocupando menos de 150 mm (6 pulgadas) de diámetro instalado.
El CCM632 también incorpora el nuevo e innovador método de fijación ZipDogs™ de Bowers & Wilkins. Éstos facilitan la instalación y se adaptan a casi cualquier grosor de panel de montaje.
Cada altavoz se suministra con un recinto integral para minimizar la contaminación acústica en los espacios contiguos. Los altavoces se suministran por pares y cada paquete incluye conjuntos de rejilla y bisel redondos y cuadrados fijados magnéticamente y totalmente personalizables.
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