El propietario del hotel / inversor local quiere realizar una atracción única frente a su hotel en la costa mediterránea, además de un puerto deportivo de lujo de alta calidad. Se trata de una ciudad que, a pesar de su ubicación costera, no dispone de playa debido a la suciedad del agua y a las vías de navegación. El plan del proyecto preveía una superficie total de 1.600 m2, que incluía un acuario flotante, una piscina, un bar al aire libre y otras instalaciones necesarias para el acuario, como una unidad veterinaria, instalaciones de estudio, etc. Durante la fase de diseño, los aspectos medioambientales, así como los requisitos especiales de los animales, se evaluaron detalladamente con el mejor especialista en la materia y se tuvieron en cuenta en la solución.
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