El diseño de la silla encarna una fusión perfecta de funcionalidad y estética, presentando una superficie de madera que integra a la perfección reposabrazos y asiento del mismo material. El concepto gira en torno a la elaboración de una pieza monolítica a partir de un único material, revelando una expansión hacia el exterior al tiempo que mantiene una estructura central estirada. La apertura de los sillones, que permite ver a través de ellos, capta un movimiento grácil que facilita el paso de la luz. Empleando tecnología avanzada, hemos aprovechado conscientemente los materiales para lograr nuestro principal objetivo: producir el sillón de forma respetuosa con el medio ambiente. Fabricada a partir de dos planchas de madera contrachapada, la silla consta de 37 secciones curvas principales hábilmente cortadas en dos o tres piezas superpuestas, lo que optimiza el uso eficiente del material. El toque final lo da un barniz al agua, que subraya nuestro compromiso con la sostenibilidad y la producción respetuosa con el medio ambiente
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