Uno de los diseños de paneles de Moko más emocionantes fue inspirado por Calais, la ciudad en el punto más estrecho del Canal de la Mancha, justo enfrente de Dover. La parte resaltada no se menciona en el original, sólo creo que es un bonito paralelismo entre los paneles "opuestos" y las ciudades opuestas. Los huecos curvos parecen divergir a primera vista, sugiriendo diferenciación y separación, pero después de unos cuantos giros imaginarios podemos conseguir un círculo perfecto y llegar a la unidad. Esta unidad y espíritu de cohesión también caracterizó a los burgueses de Calais del siglo XIV, cuyo heroico sacrificio se inmortalizó en la famosa estatua de Rodin.
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