Gracias a la cortina de gimnasio GYMNAFLEX, el complejo deportivo se convierte en un espacio polivalente adaptándose a las necesidades. Su maniobra enteramente automática ofrece a los usuarios una comodidad de manipulación inigualada.
Este concepto es ahora indispensable para las salas con aplicaciones múltiples.
Espaciadas de 450 mm y constituidas de bandas horizontales en cantidad y en longitud suficientes para cubrir completamente la apertura.
Cada pared está atada a la otra al punto de vínculo con cables de retención de 3mm de diámetro, todos los 750 mm para permitir una elevación a pliegues iguales.
Las superficies exteriores de las paredes son lisas y sin ataduras.
LAS BANDAS
Cada banda está unida por termo soldaduras y costuras hechas con máquina.
MANUTENCIÓN
El mecanismo de levantamiento con control eléctrico, está constituido de un motorreductor con un eje conectado por una cadena a un mototambor, en el cual vienen enrollarse los cables que sirven a levantar o bajar el soporte de elevación que sostiene la cortina.
INSTALACIÓN
La maniobra de levamiento o bajada del GYMNAFLEX está realizada por una persona, por el intermedio de una caja electrónica, constituida de un interruptor de llave de presión constante.
ENMARCO
TECHO: el espacio de almacenamiento superior está disimulado por un revestimiento constituido de un faldón del mismo vinilo que la cortina e instalado de cada lado del almacenamiento.
MUROS: Guías verticales a cada extremidad de la cortina (10 mm de profundidad) recubiertos de vinilo idéntico a la cortina permitiendo el ajuste a los muros laterales.